Carta a los niños de la tierra
"Hola, me llamo Satilia y soy de
Mazapán, ciudad que está en el país del centro de la Tierra. Da la
casualidad de que se llama Mazapán porque está hecha de mazapán.
Los niños y niñas pasamos el día entero comiendo las casas
abandonadas que todavía no tienen el mazapán podrido. Si dejáramos
de comerlo no estaríamos gordos como bolas. ¡¡No os riais, por
favor, que no es tan gracioso como parece!! Si vosotros estuvierais
así no os parecería divertido.
El único problema de ser así
es que no podemos andar, y por lo tanto, tenemos que girar. Dad las
gracias de que seamos taaaaaaaaaaaaaan gordos, porque somos nosotros
los que producimos el movimiento de lo que vosotros llamáis placas
tectónicas y de la rotación de la Tierra. En nuestro país lo
llamamos “vetruglagli”.
Aquí siempre es de día, porque
estamos al lado mismo del núcleo de la tierra. Siempre que queremos
dormir, tenemos que bajar la persiana. Como somos de mazapán nos
deshacemos poco a poco con el calor del núcleo, ¡con lo corta que
es nuestra vida ya de por sí! Bueno, vamos al grano.
El caso es que un día, cuando
yo estaba en el colegio el núcleo de la tierra se puso a encenderse
y apagarse intermitentemente y duro así unos años y teníamos
que trabajar el doble, sin poder ir al colegio. Después se apago del
todo. ¿Qué había ocurrido? Pues que a consecuencia de los actos
humanos de agotar los combustibles de la tierra, como el petróleo,
carbón y gas, y la tala masiva de arboles en lugares tan boscosos
como la selva amazónica, habéis hecho que se pare. Conseguimos
encenderlo de nuevo, pero a duras penas con el sacrificio de mucho de
los míos, incluso de mi familia. Con esto, queremos pediros que,
sobre todo los niños aprendan a cuidar el planeta. No tirar basura,
reciclar papel para reducir la tala de árboles, intentar crear más
zonas verdes, etc. Gracias a nuestro duro trabajo, y al de un grupo
de niños, conseguimos encender el núcleo otra vez, y es que nada es
imposible, sobre todo si no te rindes, pero esa es otra historia que
otro día os contaré. “Trutri tratri golemi poturaci”, es decir,
que “viváis para siempre”. Nuestros mundos dependen uno de otro."
El Tercer Premio, patrocinado por La Montera (Diploma más un pase de verano para la piscina de La Montera) fue para "Carta a los niños de la tierra" de Alba Santos Neira, de 5º de Primaria del Colegio Rey Aurelio de Sotrondio. En la foto con Fidel Fernández, director de la Cuenca del Nalón.
El Tercer Premio, patrocinado por La Montera (Diploma más un pase de verano para la piscina de La Montera) fue para "Carta a los niños de la tierra" de Alba Santos Neira, de 5º de Primaria del Colegio Rey Aurelio de Sotrondio. En la foto con Fidel Fernández, director de la Cuenca del Nalón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario